viernes, 18 de mayo de 2007

El día sobre el primer riel

Se disipa la claridad
y las nubes grises vuelven a su imperio
junto a los oscilantes ventarrones
trayendo, a través de la felonía y la confusión,
una eminente embarcación.

Rieles etéreos
al ras de las olas del mar
dejando atrás la superficie y el sollozo,
es la tierra donde se forjaron los recuerdos
y el amor quedó en la sombría mañana;
ahora sólo vemos astilleros y sepias.

Cuales baldosas son el empiezo y el final
para proceder y anteceder a lo magno
de la materia como el agua del mar
erigiendo luego la calidez de las banderas.

Abrazaremos la presencia,
tangencial, de los ángeles de mar
alumbrando como luciérnagas
la venidera aventura furtiva
en donde tú te haces llamar
el susurro del mar.





Deseo...
Verte navegando de regreso
Hasta el astillero sepia

escrito por: Antony Llanos

Se acabo la inspiración leve contusión el la parietal



Tengo una leve contusión en la parietal
Pobre mediano encéfalo
Que no mides tu fuerza aunque te esfuerzas y ¡¡como te esfuerzas!!
Por salir, rutilar y ser primordial,
Egocéntrico cerebelo
Tus paredes desgastadas ya han sido tocadas
Y ahora mira... ¡mira!... están rajadas;
Se acabo la inspiración leve contusión el la parietal
Y se piensa no hay nada que aportar
Pobre mediano encéfalo
Observaste tan burdamente como se iban tus sentidos,
Que amarga hendidura subsidio sus evasiones,
ahora solo y sin sentir, llorar, rabiar, amar;
Se acabo la inspiración leve contusión el la parietal

Escrito por : Sandra Enciso Gonzales